El tema de los derechos de autor es bastante complicado y muy extenso. En mi opinión no se puede ver desde el mismo prisma en todos los casos, hay muchos factores que distinguen diversas situaciones que se pueden dar. Comencemos de menor a mayor.
En mi pirámide particular pondría en la base a aquellas personas que se inician en algún tipo de arte (música, cine, escritura…) y cuya mayor pretensión es hacer llegar al mayor número de personas posible su trabajo. En este caso poco o nada le importan los derechos de autor, lo último que se le pasa por la cabeza es tratar de restringir el acceso a su obra, todo lo contrario; cuanta más gente tenga acceso a ella mejor y cuantas más facilidades haya para ello mejor aún. Esto pasa con la primera maqueta, con la primera novela, el primer blog… . En mi caso particular, lo último que se me pasó por la cabeza fue añadirle publicidad a mi blog, ya que, mi pretensión principal es hacer algo cómodo y vistoso para que la gente se sienta cómoda y “vaya al grano”. Yo creo que esta es la fase bohemia y comprensiva de todo artista. Pero…poderoso caballero es don dinero…
Una vez pasada esta etapa todo artista intenta sacar el máximo beneficio posible, acto totalmente loable, ya que no se puede vivir del aire. Sin embargo hay ocasiones en que esta situación se corrompe, y se vuelve abusiva. Hay un factor muy importante que entra en juego, y es la discográfica, la editorial, el representante de turno…cuyo objetivo principal es exprimir al artista de turno. Aquí yo creo que es donde se empieza a complicar la cosa, cuando hay mucha gente que quiere “chupar de la teta”. Los precios pasan de lo aceptable a lo desorbitado, y la gente pasa de la buena voluntad al “tonto el último”. Y pasan de aceptar pagar una cantidad razonable por algo, a no querer pagar absolutamente nada ya que empieza a tener la sensación de que le están intentando tomar el pelo.
Esta es la situación actual que tenemos, la gente ha cambiado la mentalidad y no considera justo pagar por ciertas obras de arte, y gran parte de culpa la tiene la propia industria. Yo creo que no es algo por lo que escandalizarse, ya que a cambio de ello, la sociedad si que está dispuesta a pagar unas cantidades mayores, y con mayor frecuencia por otro tipo de arte, como son los conciertos, las representaciones, etc.… Con esta situación yo creo que se ha cambiado la forma de ingresar dinero, no creo que se hayan perdido ingresos. Es cierto que requiere un trabajo mayor por parte de los artistas, pero es que tampoco era justo que se limitasen a editar un disco y no se ofrecieran de ninguna manera a los fans. De esta forma, conseguimos una mayor cantidad de recursos artísticos y distintas formas de disfrutar del arte.
Caso aparte es el reconocimiento del autor. Personalmente si que considero una aberración la utilización del trabajo de otra persona en beneficio propio, sin tan siquiera nombrarlo. Es por esto que las licencias Creative Commons están teniendo un éxito cada vez mayor, ya que es una forma de advertir al posible “infractor” de que a lo que está intentando acceder es propiedad intelectual de otra persona. Personalmente, considero que no hay mejor beneficio que muchas personas decidan utilizar tu arte para el disfrute de otro, ver que lo que has hecho gusta y mucho. Con los grandes artistas esto es casi insignificante, porque todo el mundo reconoce a simple vista sus obras. Pero con los pequeños artistas es yo creo su primer y mayor premio, ver a sus pequeñas obras crecer.
Estamos de acuerdo en que a nadie le gusta perder dinero, pero tampoco hay que olvidar que la gente tiene un límite. No se puede estar estrujando ilimitadamente al personal, porque al final saltan, y se inventan mil formas de darle la vuelta a la situación.
Para concluir, yo pienso que si la industria ha sido la principal responsable del crecimiento desmedido de los precios y el deterioro de la conciencia social acerca de la propiedad intelectual. Debe ser ella, la que idee nuevas formas para intentar restaurar una situación de concordia entre todas las partes, y una forma de hacerlo es ir de la mano con los avances tecnológicos. Demonizar todo aquello que va de acuerdo con el desarrollo de la tecnología es dar pasos atrás, (véase Youtube). La base es, el reconocimiento y el respeto, y eso hay que ganárselo poco a poco; y una forma de ello son licencias “suaves y amigables” como son las CC.